El día de hoy deseamos charlar singularmente a los progenitores. Para los hombres que aguardan con ansias a su hijo, que tienen bastante amor para prestar a sus parejas en esta etapa del embarazo, pero que en ocasiones no están seguros de de qué manera mostrarlo o qué cosas van a hacer contentos a sus esposas.
De ahí que, en estos días tan destacables deseamos ofrecerte estos consejos muy prácticos que te asistirán a ofrecerle a tu madre instantes muy contentos más adelante:
Interésate con lo que tu mujer debe decir .
Note que escribí «acción». Sé que las cosas de las que charlamos las esposas tienen la posibilidad de ser desganadas, minuciosas, tráficas o ilógicas (o todas y cada una de las precedentes). Pero si actúa tal y como si le importase lo que mencionamos, significa bastante para nosotros. Imagínese en una salón de juntas oyendo una presentación hastiada de su jefe. Aun de esta forma actuaría tal y como si estuviese entusiasmado por respeto a su jefe. Actúa entusiasmado en las críticas de tu mujer, no en todos los casos pues la charla sea atrayente, sino más bien pues amas a tu mujer.
¿Recuerdas la manera en que la levantaron, le rodearon la cintura con los brazos y la besaron delicadamente mientras que se comprometían? Repita esto múltiples ocasiones. Ten en cuenta que la enamoraste y que la acariciaste físicamente con un fluído incesante de aprecio. Pero recuerda, el propósito de todos tus mimos y exitación no es tener sexo esa noche. Es solo estar físicamente cerca (lo que naturalmente va a conducir a mucho más sexo a lo largo de la semana). Aun si ninguno de ustedes tiene un lenguaje de amor fuerte para emplear, estos recordatorios físicos la asisten a sentirse segura y cuidada.
Lava los platos
Confía en mí, nada va a hacer mucho más feliz a una mujer que lavar los platos en el almuerzo o la cena; Tras todo, ella cocinó para toda la familia y merece un instante de reposo y alegría. Con esta idea tuya, tu mujer sonreirá y va a ser feliz.
Sé que llegas a casa cansadísima, pero no hay nada superior en un hombre que su organización, y en lugar de tirar la ropa sucia del recibidor al baño tras un día ajetreado, no se necesita un esfuerzo plus. poner la ropa sucia en la caja; Indudablemente, tu mujer va a saber agradecer tu asistencia en las tareas cotidianas.
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- Cyrilsays 11 de agosto de 2023 a las 02:19 Esto está realmente bien escrito Contestar